domingo, 29 de abril de 2012

Una canción colombiana...



Una vez surgió la idea de componer una canción que incluyera algunos detalles derivados de una grata experiencia al bailar con una novia. La chica meneaba su cuerpo con una gracia singular y una sensualidad que yo jamás le había notado antes, pues siempre había sido muy seria y callada. Pero esa tarde que fuimos a una taberna, al ver ella que sólo estábamos los dos le dio por ponerse a bailar sola y, desplegó tal liberación de todos sus fantasmas, que en el movimiento de sus caderas se extasiaba todo mi ser. Vi sus brazos al viento enarbolando imaginarias filigranas que causaron tal frenesí... que en un recuerdo tardío estimularon mi cabeza haciendo que surgiera un murmullo de notas al vaivén de aquellos sensuales movimientos que aún escurrían los deleites emanados esa tarde del baile. 

Muchas veces había intentado ponerle un nombre cariñoso a la chica -de nombre Íngrid-, pero los diminutivos Ingridcita o Ingridcilla me parecían muy largos, poco románticos. Ni supe cómo vino a surgir de mi cabeza la palabra 'Guilla'. Supongo que fue una variación al diminutivo Ingridcilla. Y a ella no le disgustó.

Entonces, cuando días después le mostré mi canción, se me ocurrió incluir tal nombre en el coro, susurrándolo de varias formas: Guilli, Guilla, Guillita... El caso es que a ella pareció agradarle ese diminutivo, y eso me estimuló a incorporarlo en el coro, donde decía: "Guilli, Guilla, Guillita, Guillitá, Guillitá"... el cual se repetía tres veces, y en la última cerraba con Íngrid es mi Gui-lli-ta". Admito que a un curioso observador le puede sonar tonto, pero no se me ocurrió otra cosa.

Más adelante, cuando retomé ese remedo de composición para convertirla realmente en una canción ya consolidada como cumbia, en lugar de aquel coro tan personal (y tonto) inventé una estrofa. Y al final, a falta de mayor inspiración, se me ocurrió cerrar con un trabalenguas escalonado en varias tonalidades musicales, terminando en el tono original:

Si me ven contento 
es porque hoy la vi bailar; 
meneaba su cuerpo 
con gracia y sensualidad.

Sus caderas, ¡qué sabor!...
y su rítmico vaivén,
y ese lamento en su voz (cumbiaaa)
lo hacen a uno todo estremecer.

Báilame la cumbia cumbiambera, cumbia ya, 
que la cumbia es buena si le suena tamborá... 
Porque cumbia es cumbia, y cuando suena es pa' bailar... 
cumbia es rica-mú-si-ca. (Bis).

Báilame la cumbia, 
cumbiambera colombiana,
que la cumbia cuando suena es buena
pa' bailá' y gozá' su rica mú-si-ca.






No hay comentarios:

Publicar un comentario